El diseño del tratamiento dependerá de la situación escolar, familiar y personal del niño o la niña, teniendo en cuenta los objetivos que él mismo o su familia tiene, siempre guiado por el equipo terapéutico. Es un tratamiento flexible que se irá adaptando según la evolución del niño o niña.
Siempre dirigido a buscar la máxima funcionalidad e independencia del niño o niña.